Adán entra de lleno con este Post con una problemática muy viva dentro de nuestro sector, su punto de visión nos invita a la reflexión de hacia donde vamos , como en mas de una ocasión he comentado , para mi el gran sumiller, es aquel que domina el arte de trabajar en la sala, que antes de ejercer como tal, conoce a la perfección el trabajo en Sala, sino será difícil que pueda realmente satisfacer las necesidades del cliente, y lo más importante, nunca estará integrado en el conjunto del equipo, los sumilleres no son una rama a parte de la estructura de las sala, todos somos equipo!!
Esto no es más que un desahogo, no quiero parecer un líder sindicalista ni un personaje mosqueado que aprovecha la quietud de un teclado para decir algo que piensa, si no que quiero aprovechar este medio para deja escrito algo que vengo tiempo gritando a los cuatro vientos, mi lamento por la desunión de los trabajadores de la Hostelería.
Cuando en el día a día observo como los cocineros van por un lado y la sala por otro, y que estos todavía se dividen entre Maestresalas, Camareros, Cocteleros y Sumilleres…. Cada uno por su lado, creo que vamos mal, esto no pinta bien y este momento de inflexión sería el ideal para comenzar a cambiar las cosas, que falta hace.
El Restaurante, Bar o cualquier local Hostelero (creo que todas las empresas) debe ser un ente que cree equipo, todos a una, pero en beneficio de todos claro está, pero esto no es así ni en los mejores locales, siempre hay corrillos y diferencias abismales de sueldo, horarios, contratos…. De uno u otro, o todo. Esto en partes culpa de los principales afectados y por la parte que me toca me voy a centrar en el personal de sala, más aún en la Sumillería Española, para no meterme en camisa de once varas.
El caso de la Sumillería Española tiene tela, pero tela marinera. Somos una profesión complicada, porque partimos de la base de ser “camareros”, pero con una especialización, formación, obligaciones y requerimientos especiales, pero no hay un titulo formalizado en el país, ni una formación reglada que se ajuste a criterios serios y profesionales, por poner un ejemplo, en Valdepeñas y Talavera se han llevado a cabo unos cursos titulados “Sumiller” con un buen número de horas basados en el B.O.E. y que han realizado unos alumnos que en la mayoría de los casos no han sido camareros nunca, no han cogido una bandeja mucho menos llevado un rango, ¿qué os parece?.
En nuestro querido país tenemos claras la jerarquía y nuestros méritos, no obstante guardamos un complejo enorme que nos impide llegar a una situación laboral de la que sentirnos orgullosos, la gran mayoría de los trabajadores de sala tienen contratos que no les garantizan una situación cómoda a cambio de trabajar horas y horas, festivos y noches del mismo modo que un día cualquiera. Además priorizamos nuestro criterio personal ante el beneficio común, claro, que no hay comunidad…
Desde hace unos años observo desde cerca un problema que es parte de mi queja, las Asociaciones de Sumilleres, que empieza en definir quién es Sumiller y quién puede pertenecer a esta, además de eso, no hay un ente nacional que una a todos, existe la U.A.E.S. o Unión de Asociación Española de Sumilleres, pero entre otras, la Asociación Madrileña de Sumilleres no pertenece a esta unión, por discrepancias muy a tener en cuenta, de acuerdo, pero nada que no se solucionase en las urnas, si hay motivo es de ley apelar al referéndum y esclarecer el gusto de la mayoría, y acatarlo en pro de un “bien común” de nuevo.
El hecho de contar con una unión nacional tiene con diferencia más cosas favorables que seguir como estamos, donde la formación de este oficio la arregla gente ajena, donde no se nos reconoce una profesión a efectos legales, ni se nos valora apoyándose en la conformidad (silencio) de nuestro representantes, que hacen lo que pueden, pero solos.
Desde estas letras que me permite Abel, llamo a la unidad nacional de los profesionales de sala, en concreto de los Sumilleres, que se respete el principio democrático de mayoría y que se active de una vez este bello oficio, que pese a todo es un modo de vida. Y me gustaría que de una vez fuéramos capaces de abandonar intereses personales y egocentrismos, que los que nos gobiernan dejen de ofrecer cursos y subvenciones a ajenos a los intereses y requisitos necesarios para la Hostelería.
Adán Israel
Presidente ASUMAN
Vcpte. Asoc. Sumilleres CLM
Lamentablemente esto es algo muy «español» y siempre va en perjuicio primero de los profesionales del sector (del resto no, porque no les importa nada) y después en perjuicio de la clientela que cada día más necesitamos que nos vendan experiencias, conocimiento, savoir faire y mucha mucha sonrisa y felicidad.
Salud.
Hola Rosa!
Estoy totalmente de acuerdo, el cliente es el principal perjudicado.
Un cordial saludo!
Los convenios laborales……. 40 horas….. 45 dias de vacaciones……
Ya ves Manu, ¿cuantos crees que les importa? yo se que es muy dificil las 40 horas, pero que se refleje en nuestra cotización! por ejemplo…
Gracias y un cordial saludo!
Este tema es espinoso, seguro te ganarás enemigos Adam, suerte…
Espero que no amigo, creo que los que me conocen saben que no soy polémico, que este tema está en boca de todos y que nada más lejos de mi intención que perjudicar a nadie.
gracias por leernos y un abrazo!